Amigos
Como para relajarnos un poco de tanta pelea,  les envío un cuento de nuestro gran escritor Julio Ramón Ribeyro.
Valga la reflexión,  para hacernos recordar que todos debemos ser únicos,  no por cambiar nuestro apellido de Chuquimamani a Portillo vamos a ser mejores,   estas cosas dicen mucho de cada quién y cada cual,  puesto que en nuestro amado país,  todos somos mestizos, unos más que otros,  pero nadie puede pretender ser mejor por su color de piel o tal o cual apellido.  El racismo y la falta de identidad no son más que una lacra y un defecto,   eso tenemos que enseñar a nuestros hijos,  si no, no avanzamos.
Un abrazo y seguramente la próxima comunicación será con las mejoras en cuanto  a la Federación se refiere.
 
 
 
Boris Ascue
Presidente de la Federación Deportiva Peruana de Ajedrez